DECLARACIÓN DE LA ALIANZA PROGRESISTA DE LAS AMÉRICAS (APLA) EN EL MARCO DE LA CUMBRE IBEROAMERICANA

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Nuestra región atraviesa un momento complejo. Estamos en un contexto que genera una creciente preocupación tanto por la situación mundial del incremento de los movimientos neofascistas, autoritarios y reaccionarios, como por las consecuencias sociales y económicas derivadas de la pandemia COVID-19 y la extensión de la guerra iniciada hace poco más de un año a partir de la invasión de Rusia en Ucrania que ha sumado, en las últimas semanas, la perspectiva de una escalada nuclear.

Latinoamérica no es ajena a este momento de fragilidad y suma factores de riesgo propios tales como la desigualdad, la crisis ambiental y el incremento del precio de los alimentos, lo cual impacta en los sectores más desfavorecidos, haciendo impostergable un abordaje profundo y efectivo en esta materia.

En términos institucionales éste es un momento de grandes contradicciones. Por un lado celebramos que cinco países latinoamericanos hayan elegido, a través de elecciones democráticas, Presidentes progresistas, hecho que nos llena de esperanzas. Pero también no podemos ser indiferentes ante los recientes ataques a la democracia en varios países de la región y la inestabilidad que atraviesan varias naciones de la región.

En ese marco es que queremos abordar estos desafíos desde una mirada progresista, impulsando en cada país modelos de desarrollo social en los cuales las juventudes, las mujeres y los movimientos sociales sean protagonistas. Queremos trazar rutas progresistas para profundizar las democracias y formular programas de gobierno para el progreso y la igualdad.

Ante esta realidad, y en virtud de la realización de la Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado en Santo Domingo, República Dominicana, la APLA, plataforma regional en las Américas de la Alianza Progresista global conformada por partidos políticos, fundaciones y organizaciones progresistas de toda la región, quiere manifestar:

– Un saludo fraterno al Gobierno Dominicano, anfitrión de la cumbre, y al Partido Revolucionario Moderno y su Presidente Luis Abinader, los cuales son un ejemplo de buena política socialdemócrata en el país.

– La clara convicción, y sin cortapisas, acerca de nuestro compromiso con la democracia, el respeto al Estado de derecho y del estado de bienestar basado en la solidaridad y la igualdad, tanto en la sociedad, como dentro de nuestras organizaciones En muchas ocasiones pretendidos partidos y organizaciones de izquierda declaman la democracia en las calles pero reproducen prácticas cerradas hacia su interior.

– Nuestra esperanza de que el ejercicio de los gobiernos progresistas y populares en Chile, Colombia, Brasil y Honduras contribuirá al fortalecimiento de la integración regional.

– Nuestro apoyo al proceso de paz total y las reformas fiscales y sociales que impulsa el Presidente de Colombia Gustavo Petro.

– Nuestro respaldo al gobierno del compañero Luiz Inazio “Lula Da Silva” y la defensa irrestricta de la democracia, ante los intentos de desestabilización impulsados por sectores vinculados al ex Presidente Jair Bolsonaro.

– Nuestra condena al régimen autoritario de Nicaragua, y la exigencia del inmediato restablecimiento de las garantías democráticas.

– Nuestra exigencia de liberación a las presas y presos políticos en diversos países de la región.

– Nuestra preocupación por el brote inflacionario en la región, provocado en parte como resultado de la especulación de los mercados financieros con pretexto de la guerra rusa en Ucrania.

– Nuestra satisfacción por la actitud abierta y solidaria de los gobiernos de España, Chile, Argentina, Colombia y México para con las y los cientos de nicaragüenses expatriados y desterrados por el régimen de Ortega y Murillo.

– Nuestra demanda de compromiso y colaboración por parte de la comunidad internacional para el inmediato restablecimiento de las garantías constitucionales en nuestra hermana república de Haití.

– Nuestro urgente llamado a la Presidenta de Perú Dina Boluarte cese de la violencia y la represión que ya se ha cobrado más de 100 vidas, así como a la constitución de una mesa de diálogo que aborde las demandas populares y regionales, que permita encauzar una salida democrática y progresista en el país.

– Nuestro repudio a la persecución judicial y política de la que son víctimas referentes de la prensa independiente y figuras políticas de la oposición en Guatemala.

– Nuestro apoyo al proceso de Reforma Constitucional que ha iniciado en la República de Chile que, esperamos, permita dejar atrás la actual Constitución gestada durante la Dictadura civil-militar.

– Nuestro emocionado recuerdo al Presidente constitucional de Chile, Salvador Allende, y la conmemoración de los 50 años del golpe civil-militar de septiembre de 1973.

– Nuestro abrazo al pueblo argentino a 40 años de la recuperación de la democracia.

– Nuestra condena a las iniciativas que pretenden capturar los órganos autónomos independientes de carácter electoral. Esto va en contra de los valores de la socialdemocracia.

– Nuestro reconocimiento al riesgo que significa para la democracia el papel del narcotráfico y el crimen organizado en nuestros Estados, instando a los gobiernos de la región a abordar esta amenaza con todas las fuerzas.

– Nuestro rechazo a las tentativas de una regresión autoritaria que se está dando en diversos países de nuestra región. Nos pronunciamos en favor de la paz para el desarrollo y el desarrollo para la paz en nuestro continente.

– Nuestra preocupación por las iniciativas que pretenden el desmantelamiento de las instituciones del estado de bienestar, las reformas educativas regresivas y la protección social en varios países de nuestra región.

– Nuestra preocupación ante la reciente crisis de los mercados financieros internacionales, y la necesidad de que la comunidad internacional ejerza control sobre los capitales especulativos.

– Nuestra condena a la invasión rusa a Ucrania, y el reclamo de un inmediato alto al fuego, respeto a los acuerdos internacionales de paz y retiro inmediato de las tropas rusas.

Para finalizar saludamos todas las iniciativas que tengan por objetivo fortalecer nuestra familia política en la región y a nivel global. E invitamos a desarrollar una acción contundente desde una perspectiva progresista y ambiciosa tanto a nivel regional como a nivel global.