Durante estos casi 50 años, Chile sufrió una dictadura neo-liberal y una democracia dominada por el neo-liberalismo. En octubre 2019, Chile se despertó y se levantó para decir basta! Desde entonces sus fuerzas progresistas se unieron con el proyecto de trabajar “hasta que la dignidad se haga costumbre”.

Primero ganaron el derecho a escribir una nueva constitución de forma única en el mundo: ciudadana, paritaria y que incluye a sus pueblos originarios.

Ahora Chile eligió al que va a encabezar las reformas que necesita, Gabriel Boric ^[1], su nuevo Presidente de la República. Tiene 35 años, viene del Estrecho de Magallanes, en el extremo sur del mundo, y hace 10 años, junto con sus compañeros líderes estudiantiles, iniciaron este movimiento de esperanza.

Las elecciones en Chile son una lección para los pueblos que aspiran a una vida digna en democracia. Son una lección de unión para las izquierdas y las fuerzas progresistas.

La Alianza Progresista apoyo estos procesos desde su inicio y hoy está presente en Chile para seguir aprendiendo y apoyando este nuevo camino de esperanza abierto por una nueva generación. Esperanza y dignidad, es lo que el mundo necesita, ahora más que nunca. Viva Chile!